Historia de un Moribundo y el Cuervo que le esperaba

   ―Oye, despierta, ¿aun estas vivo?, tengo apetito ― graznó un cuervo para en lo alto de un poste de madera, en esa larga y desértica carretera.

―Sí, aun vivo, sin intenciones de ser tu alimento ―replicó el vagabundo, que estaba apoyado en el poste y que se cubrió sobre los ojos con una mano para poder mirar hacia el cuervo ―. ¿Por qué no mejor te vas y te vas a molestar a un verdadero muerto? ― el cuervo solo grazno un poco y acicaló sus alas. Las horas pasaban y el sol quemaba la tierra con la intensidad de un volcán.

  Las horas pasaron, y el vagabundo comenzó a toser ahogado. El sol ya se iba a poner, y el camino no daba a luz ninguna existencia salvo las dos peculiares personalidades que estaban al amparo de ese poste. A esa hora la ciudad a la distancia era visible… por ese largo y estrecho camino, aún lejana… pero mucho más que el punto de inicio de tal trayecto.

   ― ¿Cuanto más pretendes tardar en morir?, ¡Ya tengo apetito! –dijo toscamente y bajo desde el poste para picotear la cabeza del vagabundo.

―Si logras hacerme dormir con algún cuento tal vez muera dormido, Vivo no caeré… ―dijo mientras cargo una mano en el piso. En tanto, el cuervo bajó a su hombro a graznar en su oído.

― Había una vez, un hombre, que deliraba en un poste, creyendo que alguien lo encontraría, alguien que no fuera su captor y final verdugo…. Jajaja…. ―luego vino un completo silencio, la risa del cuervo paro de súbito. Nunca vió venir la mano del mendigo por su cuello y sólo se oyó el leve crack de su cuello.

―Nunca viste venir eso… ni yo esperaré a ver que mueras ―dicho esto se escuchó un graznido de desespero… cuando el vagabundo clavo una astilla en la maltrecha ave y comenzó a beber su sangre. ―. Ahora yo te contaré una historia ―dijo al ave que agonizaba rápidamente ―, la historia de alguien que hizo de su captor su presa y que llego a su meta. ―Luego de eso, el ave, falleció.

   El menoscabado hombre se puso de pie y a tientas comenzó a avanzar con algo de dificultad, pero amparado por la eterna noche, persiguiendo esa ciudad, que sólo de noche ha de brillar. Sin embargo no era como seguir el mismo camino, el semblante del hombre era otro, su mirada, se perdió entre el odio al cuervo vivo y el peso de ver al cuervo muerto. De todos modos, esbozo una sonrisa, sobrevivió a costa de lo que lo haría morir. Lo que viniese después, con esos nuevos ojos lo enfrentaría.

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Decidí embarcarme de nuevo en experimentar con los textos... hace mucho que no podía dar una conclusión a uno de mis escritos, así que me enfoque en probar algo nuevo. Una trama bastante oscura, recordando Habitación del Laberinto, y a la vez con un enfoque un poco más satírico de como actuaría un agonizante, bajo la presión de la muerte misma. Espero que les haya gustado, :) y al ser una de mis pruebas con géneros algo ajenos a mi todo comentario es bienvenido. Esta vez mis saludos van para quienes siguen este blog, agradeciendo que lo apoyen de esa manera y ojala algún día más personas se integren a eso. También saludos para mis amigos Paulo y Felipe, que pase lo que pase no hay terremoto que nos divida, y también para Miku-neechan, Aruheri-neechan y para Dranz mi bro que se :) que también de tanto en tanto os hago pasear por mi blog. para los demás también saludos, se que estoy olvidando a más de alguno, pero ya os volverá a tocar. Hasta la próxima. Linkin Boss.